

Un limpieza facial profunda es vital para cuidar la salud de la piel y procurar su bienestar y juventud. Su realización se basa en la remoción de impurezas de la piel y células muertas para devolverle energía y salud al rostro.
Los principales factores de contaminación que afectan la calidad de nuestra piel están relacionados con el sol, el clima, el viento, la contaminación, el cigarrillo, la alimentación y el maquillaje. Todos estos factores son inevitables y los debemos enfrentar diariamente, por lo que es muy importante hacerse una limpieza facial profunda periódicamente.
Dentro de los beneficios que ofrece la limpieza facial profunda podemos decir que ayuda a :
- Retardar el envejecimiento de la piel
- Elimina y remueve las impurezas y células muertas
- Ayuda a remover los puntos negros
- Estimula la absorción de productos cosméticos
- Aumenta la hidratación
El procedimiento de la limpieza facial profunda se realiza con la aplicación de productos des congestionan tes y cremas específicas para cada tipo de piel, a su vez se procede a eliminar puntos negros, blancos, imperfecciones y pústulas. El proceso termina con la aplicación de tónicos que ayuden a cerrar los poros e hidratar la piel del rostro.
De igual forma, por medio de las limpiezas faciales se exfolia la capa superficial de la piel dejándola más transparente, sana, fina, traslúcida y estimulando a la regeneración de nuevas células.
En cuanto el número de sesiones que se deben realizar de limpieza facial profunda, es importante saber que éstos varían en relación al tipo de piel y cantidad de grasa, pero comúnmente se realizan una vez al mes en centros médicos especializados, pues al usar productos farmacéuticos y máquinas especiales se necesita de una cosmetóloga profesional.